Una de las actividades más esperadas de los últimos tiempos en el Grupo de Montaña, después de su aplazamiento por mal tiempo el invierno pasado.
Esta vez si, día esplendido para la práctica de la escala, temperatura escepcional, nada de viento y animación en la pared como en todas las salidas del club. Buen rollo y risas toda la mañana.
El esperado regreso a la vertical de nuestro vocal de senderismo, Jesús, que después de años de colgar los pies de gato y el arnés nos deleito de su buen hacer y técnica de maestro. Donde hay siempre queda.
El estreno en estos menesteres de varios compañeros quedando muy satisfechos de la actividad como Miguel, Miguel Ángel y Sergio, dando la talla en todo momento y con una soltura digna de una experiencia mas dilatada.
La vuelta del “Sensei” Dani y Pedro “El Toti” dando espectáculo a lo Cristiano y Messi.
Y el trío la la la. Salvador “El Rojo”, Joa y Muru, los tres en su línea.
Una actividad para disfrutar de una jornada trepando, muy buen ambiente, compañía y un día espectacular.
Pongo un poco de información sacada de Internet sobre la vía y recomendaciones.
Joaquín M.
La sierra del Cid se encuentra entre los municipios de Petrer, Novelda y Monforte del Cid, se extiende en dirección Noroeste–Sureste y tiene un relieve muy peculiar en su parte más Occidental. Una atrayente forma de meseta elevada denominada Silla del Cid se alza vigilante hacia el Medio Vinalopó.
La vía clásica de escalada de la Norte del Cid fue abierta por los ilicitanos Rafael Botella y Juan Montesinos en 1970. Ya en 1.971, Domingo Botella y Juan Manuel Maestre la repiten con una variante de entrada, y Domingo, junto a su compañero del alma Antonio Riquelme Albert, en Marzo de 1972 empiezan a re-equipar la clásica de la Norte del Cid, con su variante, de una forma “innovadora” y diferente a la época, en España la escalada libre empezaba a dar sus primeros coletazos. Estos escaladores proponen como línea de seguridad en la ruta un cable fraccionado a anclajes ya existentes y buriles, más adelante a mitad de los noventa Domingo utilizaría parabolts. El recorrido de este itinerario intenta buscar las partes más fáciles de ascenso a la Silla del Cid por esta vertiente, lo que le lleva a evitar el primer diedro de entrada por una vira en diagonal a la derecha y algún otro paso sin importancia en la parte media; la dificultad de la vía pasó de Vº a IVº+.
Con el paso del tiempo esta vía tomará el nombre popular de ruta del “Cable del Cid”. La filosofía de esta técnica de aseguramiento se concluye en las palabras de Domingo cuando se le pregunta porqué la equiparon de esta forma y contesta “Para hacer el itinerario más asequible al mayor número de montañeros”. Lo que también es de destacar es las características de la obra que realizaron pensemos que a principios de los setenta solo se podía llegar en coche hasta la “Casica del Forestal”. Desde ahí hasta el pie de vía hay una hora de camino y hasta la cima hora y media, y todo esto cargado. Según Domingo tardaron un año en colocar el cable.
Más tarde, en 2002, Leandro Irles reequipa con formato de vía ferrata. Tras otros arreglos posteriores para proteger y reconducir la vía por zonas a las que el tránsito de escaladores no erosionase demasiado la vía, esta recibe su definitivo aspecto. El resultado: una vía ferrata hermosa, con mucho ambiente, bien equipada, fácil pero con tramos muy aéreos y disfrutones. Hay que tener en cuenta que ese «fácil» significa que se deja hacer sin ningún problema siempre que dominemos el IV grado, pues no todos los pasos verticales poseen escalones. De hecho los mejores tramos, los de más ambiente, son aquellos en los que sólo hay un cable para asegurar pasos de grado cercano o igual a IV.
RECOMENDACIONES PARA LA REALIZACION DEL ITINERARIO
- Se trata de una ruta con posibilidad de caída y desprendimientos de piedras por la precariedad de la roca en casi todo su trayecto.
- La cima de la Silla del Cid es muy visitada y esto aumenta el peligro de caídas de piedras por senderistas (máximo cuidado en fines de semana).
- El uso del casco es obligatorio.
- En invierno es una zona muy fría y húmeda, es aconsejable el uso de guantes para cogerse a los escalones metálicos.
- Respetar los senderos en todo el macizo tanto en el acceso como en el retorno.
- El itinerario tiene más de 300 metros de longitud y 250 metros de desnivel, se requiere de una condición física buena y de una familiarización con los espacios abiertos y altos.